Gran Teatre del Liceu, 20 February 2010
A week has passed since Tristan in Barcelona and truth to be told, I can't get it out of my mind.
Back in December I was raving about Sebastian Weigle and his "Tote Stadt" in Frankfurt. I had used the words "pure operatic bliss" to describe what I had felt back then and had written for Weigle "the protagonist was with no doubt Sebastian Weigle and the Frankfurter Opern-und Museumsorchester whose perfect, overwhelming, splendid, awesome (somebody stop me, please) sound sent me to an intergalactic trip for more than 2 hours".
Same applies for this Tristan, Weigle was an experience to listen to, and the orchestra of the Gran Teatre del Liceu, was in fantastic form as well. Lorin Maazel will always be my fav conductor but Weigle has already a very special place in my heart. (Next chance to hear Weigle: Parsifal in Frankfurt, starting March 7th, check his agenda for more details).
This old production of Thor Steigraber that comes to Barcelona from Los Angeles features as its main attraction David Hockney's colorful sets and costumes. They may seem awkward in the pics but they were quite impressive in the theatre, especially the Act II set, with it's fairy-tale-like castle and its perspective.
Deborah Voigt was a wonderful Isolde (if you think that Voigt is finished, well, you'd better reconsider). Her voice might have changed and she might have lost some vocal (and not only vocal) weight, but her's was a vibrant, credible Isolde who overcame all difficulties in the partitura and got to the Liebestod with enough powers to make us all weep (as a matter of fact, I was sobbing during the last few minutes, and I truly thank opera-god for still being able to experience this kind of extreme feelings in the theatre).
Listen to Deborah Voigt in Liebestod
Barcelona, 20.02.10
(no, I really didn't listen nor I cared for the last note-the "lust").
Peter Seiffert was a good Tristan but by Act III sounded exhausted. Nevertheless he did manage to rule over the huge orchestra when needed and was quite good dramatically (in a rather not challenging mise-en-scene).
Korean bass Kwangchul Youn was an elegant, imposing King Marke but it was Micaela Schuster that impressed me the most: what a fine Brangäne, what a beautiful, velvety voice. Her interventions during the Act II Tristan-Isolde duet were heart-breaking. Bo Skovhus made quite an impression too as Kurwenal, kudos also to Norbert Ernst as Melot, Francisco Vas as the Shepherd and Manel Esteve Madrid as Steurmann.
Special mention for the audience that on that night was a disgrace. Only a few seconds in the overture, a LOUD cell-phone rang, obliging maestro Weigle to start da cappo, while especially during Act II the audience didn't, not even for a second, stop coughing.
Extra special mention for the Gran Teatre del Liceu that ran out of printed programmes...
Listen to the first few minutes of the overture and the cell-phone ringing (they should hang this kind of people from a light post at Las Ramblas)
And a video + pics from the curtain calls
Micaela Schuster about to catch her flying bouquet
~.~
Debbie and her little friend signing
The post from where they should hang people with cell-phones
7 comments:
Finalmente, Parsi!!! Que ganas tenía de leer tu crónica detallada. Me alegro mucho de que disfrutaras tanto. Coincido totalmente en tus muy positivas valoraciones sobre Weigle, criticado muchas veces injustamente en el Liceu.
Y también me encanta tu "rapapolvo" al público. Si señor!: Barcelona debe tener el mayor número de tísico-tuberculosos por metro cuadrado de todos los teatros de Ópera, nunca en otros sitios oigo toser tanto y tan fuerte. Y lo del móbil...efectivamente, al propietario colgarlo de un poste, como mínimo, y retirarle el abono al Liceu para toda la vida. Besos, nen!
Tere! La verdad q he estado muy liado toda esta semana con el trabajo y lo q hay q ver aqui en Atenas.
Bueno, hay noches y noches. Parece q yo he vivido una de las mejores noches de este Tristan, creo q se puede comprobar tambien del video donde se oye al publico bravear a todos y especialmente a Weigle y a la orquesta.
No, el publico del Liceu NO es asi siempre, no he estado tantas veces como para poder tener una idea muy fija, pero por las casi 10 veces q he estado, puedo decir q el publico del Liceu es uno de los mejores q hay, pero hay cabrones por todas partes, como este sinverguenzas q no apagó el movil. Y ademas tengo q admitir q el Liceu tiene uno de los publicos mas guapos y juveniles q nunca he visto :)
Por cierto, Weigle es mi Dios :)
jajajajaja...¿más guapos y juveniles? ¿a que hora te habias ido a dormir? ¿cuánto habías bebido? ¿tanto daña el cerebro y la visión la música wagneriana?
La verdad q habia ido a dormir a las 6.30 (tras una noche "fantastica" en Cabaret-Berlin). Pero sigo pensando q es asi, joer, hay q ver la gente en Alemania como va vestida, todos como la Gruberova. Almenos en el Liceu se puede tambien ligar ejejejeje (en serio, lo he hecho!).
ahhhh, eso es otra cosa...como la Grube no, evidentemente, en Barcelona se tiene otro estilo, afortunadamente. Y lo otro...pues claro, como no, guapo!
Aprovechando lo extraordinariamente bien que hablan el español estos jovenes griegos que adoran la ópera, voy a ver si me resuelven una duda.
Estuve en el Liceo el pasado 12, y coincido en mucho con lo que Vd dice: Los decorados, obra de arte que por sí sola ya merecía las cuatro horas, Marke, y más aun Brangane, los mejores a distancia, pero sobre todo, coincido especialmente en lo mucho y repetidamente que me emocioné. Sin embargo, eso se lo debo a Wagner, a Weigle y a la orquesta, y no tanto a los principales intérpretes. Sali flotando (mi primer Tristán...) a pesar de lo poco que me gustaron Tristan e Isolda... El primero, soso al principio y agotado al final, banal en todo caso. Pero es que el primer acto de Deborah Voigt fue para suicidarse. Horrible voz, y de cantar, nada: Gritar y vociferar recitando. Mejoró mucho en la segunda parte, sobre todo cuando en los duos parecia encontrar apoyo. Y también estaba bien en el Liebestodt, hasta el punto de que, entre lagrimas, ya me estaba reconciliando con ella (o con quien decidó contratarla), cuando se produjo lo que motiva este escrito: Pareció como si le faltara el aliento, y se cortó la última nota, con lo que me dejó como en un... interruptus. Bueno. Pues luego leo en la crítica de una grabación suya del Tristan con Thielemann, (Robert Levine, para quien también lo mejor es el duo del segunod acto) lo siguiente: "The "Liebestod" begins slowly and introspectively, but it not only loses focus and lacks rapture, it also is spoiled by a problematic approach to and landing on the final soft F-sharp. It's just one of those unlucky breaks that occur in live performances."
Y ahora aqui: "(no, I really didn't listen nor I cared for the last note-the "lust")." Y como mi inglés, ni con la ayuda de Mr. Google da para muchas matizaciones, le pregunto: ¿Que pasa con ese final? ¿Es tema de conversación? ¿No puede? ¿No quiere? ¿Tropieza siempre con la misma piedra?
Gracias anticipadas por su respuesta, que esperaré con ansiedad.
P.S. Esa noche no se tosió demasiado. Yo propongo pena de muerte para los de los móviles: Colgarlos de un farol de las Ramblas, pero colgarlos del cuello. Y para todos, un test previo a la entrada: Quien no sea capaz de contener la tos a pesar del silencio al que se le someterá en una cámara ad-hoc durante un minuto, no entra.
no, I really didn't listen nor I cared for the last note-the "lust").
Gracias! Pues, parece q hubo almenos dos personas q lloraron con el Liebestod de Voigt (o con el genio de Wagner?). La F-sharp como escribo, no la oí en el teatro, no me enteré, en aquel momento estaba en otro mundo, tuve q ascoltar la grabacion pa darme cuenta. una nota no cambia una interpretacion y esa conversacion me recuerda la Divina q rompía la ultima nota de Addio del passato y cuando Rescigno le instructó cantarla no piano sino FF con diminuendo ella dijo "Nicola, no puedo, estoy murriendo" :)
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